En este artículo, nuestro director, Jesús Garrote, resume el viaje que recientemente hemos realizado a Italia. Puedes leerlo completo aquí:

«Después de dos años sin poder salir de España por la pandemia, ochenta y seis personas entre alumnos y educadores hemos recorrido Italia en dos autobuses litera. Reventón de una rueda y avería de autobús con sustitutos italianos y franceses, se ha cumplido lo previsto. (…)

Hay que creer mucho en los chicos y la fuerza de la cultura para embarcarse en esta aventura por la historia, con una importante inversión económica y asunción de riesgos. Los educadores que se quedan y los que van requieren gran organización, desde la comida de las latas a los itinerarios.

Una mayoría no había salido de España, otros ni habían visto el mar, por lo que se han bañado en una playa cercana a Venecia y en San Sebastián a pesar de hacer mucho frío. (…) Ha habido sorpresas de algún chico etiquetado de infractor que se emocionaba ante los monumentos y lo que significaban. Otro que decía que todo estaba en google. Pero la convivencia incomodada y atípica, con más intimidad en grupos pequeños familiares, nos ha obligado a derribar diagnósticos y a reír con razones y sin ellas.

Un Miguel Ángel que esculpía la Piedad con veintitrés años o pintaba la Capilla Sixtina no era un obediente alumno de las escuelas de entonces.

Poco hemos aprendido de la historia cuando los grandes genios normalmente fueron castigados por la sociedad de su tiempo, rechazados y juzgados.

Quién puede asegurar que un viaje no pueda servir para inspirar el genio de uno de los nuestros. Ha sido con chicos nuevos el último viaje de la escuela viajera de Santiago 1».