Desde la Casa Escuela Santiago Uno queremos expresar nuestro más profundo agradecimiento a D. Antonio, juez de Menores de Zamora, por su compromiso y escucha durante todos estos años de trabajo conjunto.

Han sido años intensos, llenos de retos y también de logros compartidos, en los que hemos tenido la fortuna de contar con un profesional cercano, sensible y profundamente implicado en la realidad de los menores en situación de vulnerabilidad. Su mirada, siempre justa pero también comprensiva, ha sido un faro para nosotros y para muchos jóvenes que encontraron una segunda oportunidad gracias a su confianza en nuestro proyecto educativo.

Hemos de agradecer, además, que en la última entrevista que hemos mantenido con él al finalizar haya dedicado a todo el equipo de la Casa Escuela su agradecimiento por la labor que realizamos.

Por ello, en nombre de todos los «santiagueros» no podemos sino dar las gracias por su generosidad, su cercanía y su constante apoyo. Le deseamos lo mejor en su nueva etapa, convencidos de que seguirá inspirando allí donde esté.

Gracias, de corazón, por haber sido parte de nuestra historia.